Acciones políticas contra la desaparición forzada
Las acciones del GAM, luego de constituirse formalmente, se enfocaron en demandar la aparición con vida de los familiares desaparecidos, de proteger su derecho a organizarse y en fortalecer la solidaridad hacia su lucha entre diversos actores al interior del país y al nivel internacional.
En 1984, las acciones para demandar la aparición con vida de los desaparecidos incluyeron cartas públicas al pueblo de Guatemala y una marcha de 27 kilómetros desde San Lucas Sacatepéquez hacia el Parque Central de la capital guatemalteca donde participaron más de tres mil personas y terminó con una misa en la Catedral Metropolitana.
Otra manifestación histórica se llevó a cabo en julio de 1985 frente al Palacio Nacional como protesta a un informe de la ONU que concluía que no había desaparecidos ni secuestrados y que la práctica de desaparición forzada no existía más. En octubre de ese mismo año, ante la falta de respuesta a las demandas, el GAM tomó las instalaciones de la catedral metropolitana para presionar al Arzobispado y al gobierno para que reforzaran los esfuerzos de integrar una comisión de la verdad, la cual brindara información sobre el paradero de los desaparecidos.
El 15 de septiembre de 1986, durante el desfile militar, miembros del GAM marcharon en silencio detrás del ejército “para que no olvidaran jamás que tras ellos caminaba el resultado de la violencia inmisericorde que han propiciado, hogares desintegrados, niños desamparados, madres desesperadas, esposas angustiadas…”
En ese mismo año, el 26 de septiembre, el GAM tomó el Palacio Nacional y la policía reaccionó agresivamente contra las y los manifestantes, lo que provocó una condena internacional de los hechos por parte de diversos organismos internacionales protectores de los derechos humanos.
En 1988, el GAM inició una campaña contra la Ley de Amnistía (32/88), la cual beneficiaba a los presuntos responsables de delitos contra los derechos humanos. Junto con otras organizaciones que se sumaban a la lucha del GAM, en ese mismo año también se impulsaba la designación de una fecha para conmemorar a los 45 mil desaparecidos del país.
En 1992, el GAM reclamaba la creación de la Comisión de la Verdad y 12 miembros de la organización tomaron las instalaciones del Congreso de la República e iniciaron una huelga de hambre que duró 12 días.
En 1993, el Congreso de la República instituyó el 21 de junio como el Día Nacional contra la Desaparición Forzada en memoria de 27 sindicalistas que en 1980 fueron secuestrados y nunca más se supo de su paradero.